Los efectos secundarios observados después de una dosis de refuerzo de las vacunas anti-Covid de Pfizer y Moderna son en gran medida “similares” a los experimentados después de la segunda, según un estudio estadounidense publicado a fines de septiembre.
Estos datos fueron recolectados de varios miles de personas que recibieron una tercera dosis de estos medicamentos entre mediados de agosto y mediados de septiembre, cuando fue autorizada para ciertas personas inmunodeprimidas en el país.
El estudio muestra que “las inyecciones de refuerzo se toleran bien”, dijo Rochelle Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en una conferencia de prensa.
“La frecuencia y el tipo de efectos secundarios fueron similares a los observados después de la segunda dosis de la vacuna, y en su mayoría fueron leves o moderados y de corta duración”, agregó.
Valores cercanos a después de una segunda inyección
Los datos se basan en unas 20.000 personas que se registraron en una aplicación (v-safe) y que completaron un cuestionario después de las inyecciones.
Entre los que completaron este cuestionario después de cada una de las tres dosis, aproximadamente el 79% informó una reacción localizada después de la tercera inyección (dolor en el lugar de la picadura, etc.), y el 74% una llamada reacción sistémica, es decir, que afecta a todo el cuerpo. cuerpo (fatiga …).
Después de la segunda inyección, estos números fueron 78% y 77%, respectivamente, muy similares.
De más de 20.000 personas, alrededor del 28% dijeron que no podían realizar sus actividades diarias normales después de la tercera dosis, con mayor frecuencia al día siguiente de la inyección.
Además, el estudio no necesariamente se enfoca solo en personas inmunodeprimidas, otras personas que también pueden haber recibido una tercera dosis por eludir las recomendaciones actuales, especifican los CDC.
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