Un mes después de la final de la Champions League entre Real y Liverpool (1-0) el 28 de mayo en París, los madridistas se llevaron la desagradable sorpresa de recibir fuertes multas por parte de las autoridades francesas. En cuestión, las camisetas de su equipo que llevaban a la espalda…
Hasta el final, la celebración en torno a la última final de la Champions habrá sido única. Arruinado por varios incidentes al margen del Real-Madrid-Liverpool (1-0), los festejos no serán en el Stade de France. David González, madridista de 41 años y miembro de la peña de Villajimena (norte de España), vivió la amarga experiencia, según cuenta al diario español. COMO.
Acompañado de un menor de 15 años y otros cinco adultos, él -como muchos madridistas- aprovechó las pocas horas previas al inicio del partido para pasear por el centro de París. Sobre todo en los Campos Elíseos, tan codiciados por los turistas. Es aquí donde la policía francesa arresta al cuarentón y sus amigos, reconocibles por la camiseta de su equipo.
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Motivo: “Prohibida la participación en manifestaciones en la vía pública”
Estos últimos revisan a los seis españoles, cuidando de tomar una foto de sus documentos de identidad. Si pudieron retomar su viaje y el transcurso del día siguiente, estos simpatizantes se llevaron la desagradable sorpresa, un mes después, de recibir en su domicilio dos multas de 375 euros por “participar en una manifestación prohibida en la vía pública”.
“No lo creíamos, ni cantábamos, se ofende con David González, que no dejó de facilitar una foto de una multa recibida a los medios ibéricos. (…) Caminábamos por la calle con nuestras camisetas y nuestras banderas, ¡como miles de personas más! (…) No sabemos qué hacer”. David y sus asociados intentaron que el gobierno francés cancelara sus multas, antes de que se les pidiera que “se acercaran a la embajada francesa”.
“Todo estaba oscuro, había robos a la vista…”
También intentaron ponerse en contacto con el Real Madrid en busca de apoyo, sin respuesta aún. “¿Pero qué quieres decir o probar? Seis personas con sus camisetas el día de la final de la Champions, ¿por qué quieres que esto sea un evento ‘prohibido’? Desesperado David. Sé que si a otros fanáticos les pasó lo mismo- clubes u otros fanáticos, pero vi a muchos de ellos pidiendo sus identificaciones al mismo tiempo que nosotros…”
Además de este desafortunado episodio, uno más en torno a una final de C1 que nunca deja de defraudar, el aficionado español también recuerda el resto de su noche parisina. “La organización de la final fue un desastre, una experiencia horrible”, dijo el hombre que logró ingresar al Stade de France sin incidentes tres horas antes del inicio del partido. “¿A la salida? Estaba todo oscuro, había robos a la vista, el metro era una ratonera y los taxis no se acercaban porque no querían terminar en el ojo del huracán”.
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