1. Mantener el espíritu que trajo la racha de 36 partidos sin perder
Antes de la caída, Argentina llegaba fuerte de una racha de 36 partidos sin conocer la derrota, lo que le permitió llenar la maleta con confianza. Su entrenador, Lionel Scaloni, pasó tres días convenciendo a sus tropas y a su país de que no se marchitaba: “Tenemos que pasar página y ya lo hemos hecho. Así que solo podemos pensar en ganarle a México. El primer día fue un golpe muy duro. Cuando te golpean, lo único que tienes que hacer es levantarte. Este grupo es capaz de eso, pero tienes que recuperarte, tener una reacción”.
Prueba de sus certezas, no anuncia grandes cambios, al menos no en la estructura de su equipo ni en la forma de desarrollar su fútbol: “Juguemos normalmente. Nuestro estilo no es negociable, no vamos a cambiar por el martes. Este grupo está listo para eso. No tenemos dudas sobre cómo abordar este partido”.
2. Juega bien al frente y no caigas en un falso ritmo
Independientemente de lo que diga el joven técnico, evidentemente habrá cosas que mejorar para hacerlo mejor que ante Arabia Saudí. No te conformes con 30 minutos a un buen nivel en primer lugar.
Entonces, no te sorprendas más con la intensidad opuesta. Contrariamente a lo que se podría pensar, los argentinos ganaron la mayoría de los duelos del martes (60 x 34), pero sufrieron 13 faltas solo en la segunda mitad (por tres cometidas “solo”) y parecieron perder ritmo en los cortes. Sobre todo, tendrán que apuntar con más precisión en los últimos 30 metros, donde se decide todo. Lautaro Martínez solo pudo disparar un tiro. Muy poco, para un “nueve” de un aspirante al título.
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