Equipo editorial de Media365, publicado el miércoles 12 de enero de 2022 a las 22:45.
Este miércoles, en Arabia Saudí, el Real Madrid dominó al FC Barcelona en la semifinal de la Supercopa de España (3-2, ap) y verá la final, ante el Atlético de Madrid o el Athletic de Bilbao.
Todavía habrá que esperar para sacar conclusiones, pero el FC Barcelona podría estar celebrando su partido de referencia de la era Xavi. Y esta observación no se sigue del resultado. Ante su gran rival, el club catalán jugó un partido valiente y consistente ante un Real Madrid más seguro de sí mismo, más armado en cuanto a talento y, en general, más estructurado. Resultado de las carreras: este Clásico estuvo vivo e indeciso hasta el final, devolviendo sus cartas de nobleza al cartel con mayor repercusión mediática del planeta.
Un Benzema XXL
Pese a ser más poroso defensivamente de lo habitual, la Real logró contar con un Benzema muy grande. Elegante, justo, inspirado, el internacional francés se encargó de casi todo en la primera línea del ataque madridista, como es habitual. Fue él quien sirvió al otro fuerte del momento, Vinicius Jr, en una estupenda apertura en profundidad para una bonita definición del regateador brasileño (25º). Y fue él, sobre todo, quien le dio la delantera a los suyos con una remontada imparable (72º), tres minutos después de encontrar el poste en otra acción colectiva (69º). Es comprensible: con su guía, Real muchas veces lideró el baile en este partido.
El Barça agarró
Al contrario, el Barça no se quedó fuera. Todo el mérito del blaugrana habría sido que no se hundió a pesar de sus límites actuales.. Todavía falta un tiempo para conseguir la del entrenador, pero este equipo empieza a tener personalidad. Con un Dembélé agitado -y en ocasiones frustrante-, el Barça encontró los recursos para resurgir cada vez. Luuk De Jong empató por primera vez antes del descanso en una acción iniciada por el francés (41º), antes de que su sustituto Ansu Fati arrebatara la prórroga con un casco tras un córner (83º).
Más indeciso y animado de lo esperado, este Clásico quedó así decidido al final de la noche, cuando las piernas y la cabeza se pusieron pesadas.. Y en este jueguito fue la Real, más experimentada, la que tuvo la última palabra. En un contragolpe perfecto, la banda de Ancelotti selló la clasificación para Valverde, servido por Rodrygo (98º). El joven brasileño también se perdió el descanso en los últimos segundos en otra oferta de un Benzema XXL (120º +1). En cualquier caso, el caso ha sido resuelto. Real tiene su final.
“Organizador ávido. Evangelista de tocino amigable con los hipster. Amigo de los animales en todas partes. Emprendedor”.