En México, Venezuela se juega su futuro – Liberación

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Representantes de Nicolás Maduro y opositor Juan Guaidó se reúnen este viernes para negociar bajo los auspicios de Noruega en la Ciudad de México. Por primera vez desde que comenzó la crisis, parece posible un acuerdo.

Cuando un gobierno y su oposición se sientan alrededor de una mesa en medio de una grave crisis política, suele ser una buena señal. Esto significa que, en ambas partes, estamos dispuestos a encontrar un compromiso, un terreno común. En Venezuela es más complicado. La crisis política parece irresoluble desde la reelección impugnada de Nicolás Maduro en 2018, luego la autoproclamación del adversario Juan Guaidó como presidente interino en 2019. Dos gobiernos antagónicos, de los cuales solo uno, el primero, en realidad gobierna un país en ruinas: el PIB ha caído un 80% desde 2013, la inflación aún era de 3.000% en 2020, según el Banco Central de Venezuela, y más de cinco millones de personas han huido del país. Esto se debe a años de mala gestión y corrupción, pero también a las numerosas sanciones impuestas por los países que apoyaron a Juan Guaidó en su planteamiento, Estados Unidos a la cabeza.

Hubo intentos de mediación para resolver el conflicto político, pero cada una de las principales negociaciones que se llevaron a cabo fue un rotundo fracaso. El oponente siempre ha postulado como condición sine qua non de cualquier discusión la salida de un presidente al que llamó «Usurpador», con el apoyo de unos sesenta países. Esto fue inaceptable para Nicolás Maduro, quien buscaba levantar las sanciones. Y sin embargo, en 2021, el contexto es muy diferente, y las negociaciones que comienzan este viernes en México bajo la égida de Noruega bien pueden ser …

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