Las empresas ferroviarias y los sindicatos de EE. UU. llegaron a “un acuerdo de principio” para evitar una importante huelga de carga en EE. UU. más adelante en la semana, dijo el presidente Joe Biden en un comunicado.
“El acuerdo interino alcanzado esta noche es una victoria significativa para nuestra economía y para el pueblo estadounidense”, dijo el comunicado, publicado en el sitio web de la Casa Blanca.
“Estos trabajadores ferroviarios recibirán mejores salarios, mejores condiciones de trabajo y tranquilidad sobre los costos de atención médica que tanto les costó ganar”, agregó el comunicado.
El ejecutivo de EE. UU., que puede perder mucho si una huelga interrumpe los viajes y las cadenas de suministro de las empresas estadounidenses a menos de dos meses de las elecciones intermedias, ha estado muy involucrado en evitar que ocurra tal escenario.
Debilitado políticamente, Joe Biden expresa regularmente su apoyo a los sindicatos, pero también debe evitar una crisis económica en un momento en que los estadounidenses ya enfrentan una inflación muy alta.
Las empresas involucradas y los dos sindicatos que representan mayoritariamente a los maquinistas fueron convocados a una reunión en el Ministerio del Trabajo para la mañana de este miércoles. Ya han sido contactados varias veces por el Sr. Biden o sus representantes.
“Todas las partes deben sentarse alrededor de la mesa, negociar de buena fe para resolver los asuntos pendientes y llegar a un acuerdo”, instó el miércoles la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
– “Inaceptable” –
“Un cierre de nuestro sistema ferroviario de carga sería inaceptable para nuestra economía, y el pueblo estadounidense y todas las partes deben trabajar para evitarlo”, agregó.
Anticipándose a una huelga, la empresa pública Amtrak había indicado que había cancelado todos los viajes de la línea principal para sus pasajeros a partir del jueves “para evitar posibles interrupciones en el camino”. Sin embargo, la mayoría de los trenes que conectan Boston, Nueva York y Washington en la costa este no deberían verse afectados a priori.
La federación que representa a los empresarios había advertido que si la huelga realmente comenzaba a la medianoche del viernes, detendría 7.000 trenes y podría costar dos mil millones de dólares por día. Y las empresas de transporte comenzaron a hacer arreglos para el transporte de materiales peligrosos desde el lunes.
El sindicato agrícola más grande de Estados Unidos instó el miércoles al Congreso a actuar, enfatizando que el transporte de granos por camión o barco no puede reemplazar el transporte por ferrocarril.
Otras organizaciones locales de transporte de pasajeros han advertido, como Virginia Railway Express, que conecta ciudades del norte de Virginia con la capital federal Washington, que tendrán que suspender las líneas una vez comience la huelga.
Los dirigentes de diez de los doce sindicatos del sector ya habían llegado a un acuerdo en los últimos días.
Las demandas de los sindicatos que amenazan con ir a la huelga se relacionan no tanto con los salarios como con las disposiciones sobre tiempo libre y licencia por enfermedad, y los empleados se quejan de que a veces tienen que trabajar durante largos períodos porque no tienen suficiente personal.
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