este verano, ciencia avanzada… pala en mano

este verano, ciencia avanzada… pala en mano

La riqueza del suelo no se mide solo en petróleo o diamantes. Un equipo de científicos del Inserm y la Universidad de París ha lanzado un proyecto científico participativo para buscar bacterias en la tierra que pisamos. “Casi el 80% de los antibióticos que se usan hoy en día provienen de bacterias del suelo, figura Vincent Libis, codirector e investigador del Inserm. Sin embargo, la búsqueda de nuevos antibióticos se ha estancado desde la década de 1970 y las moléculas existentes tienen cada vez menos efecto. »

Un millón de muertes por resistencia a los antibióticos en 2019

Con el tiempo y la evolución, los patógenos se vuelven resistentes al tratamiento. Un estudio publicado en enero en la revista medica la lanceta estimó que 1,2 millones de muertes en todo el mundo en 2019 se debieron a esta resistencia a los antibióticos. Y dado el tiempo requerido para el desarrollo de nuevas moléculas, debemos comenzar la tarea ahora.

“Las bacterias producen defensas químicas para protegerse de otras bacterias.describe al investigador. Son estas moléculas químicas las que adaptamos para dar lugar a nuevos antibióticos”. Los ejemplos incluyen la eritromicina, que se administra a personas que padecen angina o bronquitis, o la tetraciclina, utilizada en medicina humana, pero también en salud animal. Descubrir nuevas bacterias hace posible encontrar nuevas moléculas potenciales y, por lo tanto, nuevos antibióticos.

Una cucharadita de tierra

Pero para eso, tenemos que examinar nuestro entorno y un equipo de investigación no es suficiente. De ahí la idea de programa de ciencias de la pala, que apela a la buena voluntad de recoger una pequeña muestra de suelo, el equivalente a una cucharadita, en la mayor parte de Francia continental. La muestra debe recolectarse debajo de la primera capa de tierra vegetal y colocarse en una bolsa para congelar o en una bolsa pequeña.

También es necesario anotar las coordenadas GPS del lugar de recolección para enviar su muestra a través de La Poste (1). Preste atención al sitio de muestreo: algunas áreas están protegidas y está prohibido tomar tierra allí, incluso para una misión científica participativa. “Dependemos mucho de la creatividad de los ciudadanos, para buscar en lugares en los que no hubiéramos pensado”, espera Vincent Libis. De momento, ya se han muestreado una decena de municipios franceses, con unas 400 muestras.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *