¿Un nuevo giro en la investigación? ¿O una nueva pista falsa alimentada por los inventos de una niña que solo atizaron el dolor de los padres de la pequeña Maddie McCann, esta niña británica de 4 años desaparecida en 2007 en Portugal? Ante las palabras de Júlia, de 21 años, quien desde hace varios días asegura ser la niña desaparecida. La policía polaca se inclina por esta segunda hipótesis.
La joven Julia Wendell dice sobre Instagram ser Little Maddie: se basa en particular en una mancha en el ojo de la niña que sería similar a la de ella. Maddie y Julia también tendrían las mismas verrugas en el muslo y la cara. La joven también asegura no tener ningún recuerdo de su infancia y padece amnesia ya que fue víctima de un pedófilo alemán.
En mayo de 2007, la familia de Madeleine McCann se hospedó con amigos en un complejo hotelero en el balneario de Praia da Luz, en el Algarve, en el sur de Portugal. Esta pequeña rubia desapareció repentinamente la noche del 3 de mayo, mientras dormía en su habitación, no lejos de sus hermanos gemelos de 2 años.
“Ya podemos descartar que esta versión sea cierta”
Fue al regresar, alrededor de las 10 de la noche, de una cena organizada con amigos en el restaurante a 120 metros, cuando sus padres Kate y Gerry se dieron cuenta de que había desaparecido. Durante la noche, se turnan con sus amigos para recorrer los apartamentos donde duermen los niños, pero cuando Kate regresa a la habitación de Maddie esta vez, está vacía y las ventanas abiertas. La pareja contacta a la policía local. Pero la niña nunca se encuentra.
¿Y Julia Maddie? Julia Wendell y la familia McCann están solicitando una prueba de ADN. Pero la policía polaca no se lo cree. “Las investigaciones realizadas en esta etapa contradicen la versión presentada por esta joven. La investigación está en curso, pero ya podemos descartar que esta versión sea cierta”, explica un portavoz policial a Sitio web de noticias Gazeta.pl.
La policía polaca se basa principalmente en el certificado de nacimiento de Julia, proporcionado a los investigadores por la familia Wendell. Este último también menciona en comunicado de prensa: “Tenemos recuerdos, tenemos fotos (…). Obviamente, Julia no es Maddie. El texto va acompañado de una foto de la joven en el momento de la desaparición del pequeño británico.
Según la familia, Julia Wendell ha estado consultando a psicólogos, psiquiatras, ha recibido numerosas terapias y continúa tratamiento farmacológico por trastornos psiquiátricos significativos durante varios años. Pero Julia, de 21 años, ya ‘se fue de casa’, ‘rechaza el tratamiento’ y ‘no toma su medicación con regularidad’. Aún según sus familiares: “Tampoco aprovechó la oportunidad de tratamiento en un muy buen centro de Polonia, que accedió a acogerla. »
VIDEO. Caso Maddie: “El testigo debería haber hablado antes”
“Estamos desolados por la situación actual”, lamenta la familia en una nota, en la que lamenta “las amenazas de Julia contra nosotros, sus mentiras y sus manipulaciones…”. Familiares lo aseguran: “Tratamos de detenerlo, de explicar. »
“Sin conocer los detalles con precisión, no coincide. No creo que sea ella”, dice su lado. al diario El Independiente el detective privado contratado por la familia de la pequeña Maddie. A nivel judicial, Christian B., un pedófilo reincidente que vivió en Portugal durante varios años y fue identificado en 2020, fue procesado en Alemania en abril de 2022.
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