Los cuatro partidos gobernantes no lograron llegar a un acuerdo sobre la política de acogida de refugiados, lo que provocó la caída del gobierno, según medios nacionales.
El gobierno de coalición del primer ministro holandés, Mark Rutte, colapsó después de acaloradas negociaciones entre los cuatro partidos gobernantes sobre la política de refugiados, informaron el viernes medios nacionales.
“El gobierno no pudo llegar a un acuerdo sobre las medidas a tomar para restringir la afluencia de solicitantes de asilo. Esto es lo que se informa en La Haya“, escribe la radiotelevisión pública holandesa NOS en su sitio web. “Es el fin del gobierno de Rutte IV”, añade.
Apodado “Teflon” por su capacidad para mantenerse en el poder durante 12 años a pesar de los escándalos, lo que lo convirtió en el primer ministro con más años en el cargo en la historia holandesa, Rutte tomó las riendas de su cuarta coalición en enero de 2022 después de un récord de 271 días hábiles.
Pero el jefe de Gobierno, del partido liberal de derecha VVD, ha causado en los últimos días problemas entre sus socios de derecha y centro, exigiendo que adopten una serie de medidas divisorias en torno a la recepción de solicitantes de asilo.
Mark Rutte exigió que los otros tres partidos de la coalición gobernante, los demócratas cristianos CDA, los liberales de centro D66 y el pequeño partido protestante ChristenUnie, acuerden establecer una cuota para el número de niños de zonas en conflicto que pueden obtener asilo en Holanda.
Los refugiados ya asentados en Holanda ya no podrán ir acompañados de sus hijos si ya se alcanza una cuota mensual de 200 niños, instó también.
Pero dos partidos más flexibles en materia de inmigración, ChristenUnie y D66, se oponen a tal proyecto de ley.
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