El mundo del deporte adora los guiños históricos y las grandes historias. Es un poco de todo lo que ofrecen este martes Uruguay, Argentina, Chile y Paraguay. Reunidos en Montevideo en el mítico Estadio Centenario, ministros del deporte y presidentes de las federaciones nacionales de fútbol de cada país presentan su gran proyecto para el 2030: organizar un Mundial común en el continente sudamericano, a cien años de la primera gran misa de el fútbol que se jugaba en Uruguay.
Este proyecto para conmemorar el centenario de la Copa del Mundo, Montevideo lo viene pensando desde hace tiempo. En 2005, durante una reunión con el titular de la FIFA con motivo del 75 aniversario del evento, el entonces presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, ya había mencionado la idea. Su país habría organizado el evento solo, pero debido a la falta de infraestructura suficiente para albergar 48 equipos y 80 partidos en el lapso de un mes, fue necesario tocar las puertas de sus vecinos sudamericanos. Más de quince años después de la génesis del proyecto, muchas negociaciones, retiros y retrocesos, Uruguay, Argentina, Chile y Paraguay lanzan por fin este martes su candidatura conjunta para albergar el “Copa del Mundo Centenario”una “volver a la leyenda”dijo el Ministro del Deporte de Uruguay, Sebastien Bauza.
Sólo trece equipos en 1930
Este Mundial, si está bien organizado por estos cuatro países, corre el riesgo, afortunadamente, de no tener mucho que ver con la edición celebrada un siglo antes, una época en la que el balón redondo estaba lejos del cajero automático en el que se ha convertido. Primero, en 1930, los países miembros de la FIFA no tenían que pasar por interminables fases de clasificación para jugar en la Copa del Mundo: todos estaban invitados a participar. Pero solo 13 equipos finalmente aceptaron ir a Uruguay, incluidas solo cuatro naciones no estadounidenses: Francia, Bélgica, Yugoslavia y Rumania. Razones aducidas: el coste de enviar una delegación al otro lado del mundo en medio de una crisis económica ligada a la caída de la bolsa de 1929, y la duración del viaje, en ese momento dos semanas en barco para cruzar el Atlántico.
La organización vacila y el estadio Centenario -llamado así por el centenario de la constitución uruguaya de 1830- aún no está listo para el inicio de la competencia. Pero el evento es un éxito popular a pesar del muy bajo nivel en el campo, como lo demuestran los aproximadamente 68.000 espectadores según la FIFA (otras fuentes dicen que más de 90.000 personas) que ven la final entre Uruguay y Argentina. 30 de julio de 1930 en Montevideo.
Un feriado después de la victoria de Uruguay
A pocas horas del encuentro, el ambiente es especialmente tenso en las calles de la capital. Miles de personas son reasentadas a las puertas del estadio Centenario, que finalmente está terminado. Incluso se dice que el árbitro belga designado para oficiar el partido accedió a pitar pocas horas antes del saque inicial, exigiendo garantías para su seguridad personal y que un barco estuviera listo para partir al final del partido en caso de un Desbordamiento. Celeste acabó venciendo ante su afición por 4-2, sobre un césped parecido a un campo de patatas. En el proceso, el gobierno declaró feriado, muestra de la importancia de esta coronación a escala nacional.
Si cumples 9️⃣2️⃣ años de la hazaña de @Uruguay ⭐️
Hace casi 1⃣0⃣0⃣ años, el mítico Estadio Centenario fue el testigo de este histórico evento con las selecciones sudamericanas en la Final 🇺🇾⚽🇦🇷
CONMEBOL es la primera confederación en levantar la Copa del Mundo 🌎🏆#CreeEnGrande pic.twitter.com/XH0ougW6r1
— CONMEBOL.com (@CONMEBOL) 30 de julio de 2022
Ver el mayor evento futbolístico del mundo regresar a la tierra que lo vio nacer, cien años después, sería por tanto un hermoso guiño del destino. Sobre todo porque el proyecto sudamericano prevé que la final se realice nuevamente en el estadio Centenario. También sería la primera vez que la Copa del Mundo sería organizada conjuntamente por cuatro países, luego de la edición tripartita de 2026 (México, Canadá, Estados Unidos). Pero si imaginamos que la idea hará las delicias de los aficionados al fútbol, el partido está lejos de ser una conclusión inevitable. España y Portugal ya han anunciado una candidatura conjunta para la misma edición. También se están llevando a cabo negociaciones para una oferta israelí junto con los Emiratos Árabes Unidos y Bahrein. La decisión de la FIFA está prevista para noviembre de 2024. Hasta entonces, depende de todos convencerlos de los méritos de su proyecto.
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