Es a través de nuestros colegas de “Het Laatste Nieuws” Te presentamos la historia de dos propietarios belgas que luchan contra los ocupantes ilegales y las autoridades locales.
Originaria de Amberes, Danielle, de 67 años, relata el calvario que vivió durante varias semanas. Con residencia en la región de Málaga, de seis a ocho cubanos ocuparon la propiedad de Danielle. Y para sacarlos, Amberes tuvo que probar rápidamente que entraron ilegalmente. Dos semanas después de la invasión cubana, un abogado le dijo a Danielle que el procedimiento podría llevar dos años.
“Aparentemente, como propietario, ni siquiera se le permite cortar el agua o la electricidad. Acabo de pagar 115 euros de gastos, aunque no pude ni poner un pie en mi piso”ella denuncia HLN.
Gracias a un costoso servicio de mediación, Servi-Okupas, Danielle pudo encontrar su casa, que estaba en pésimas condiciones. Para evitar esta situación nuevamente, hizo instalar un sistema de alarma de última generación.
“Cuando traté de desalojar a los okupas, la policía se volvió en mi contra”
El segundo propietario, Hiske, lleva dos años en una situación irreal. Aunque tiene una residencia cerca de Alicante, Hiske ya no puede acceder a ella, de lo contrario tendrá que vérselas con la policía. “Invertí todos mis ahorros en un apartamento, pero ha estado ocupado durante 1,5 años. Cuando traté de desalojar a los ocupantes ilegales, la policía se volvió en mi contra”, ella explica a nuestros colegas en HLN.
Cuando se entera por su ama de llaves que un intruso se ha mudado a su casa, Hiske se va a España. Aprovecha para poner el negocio del okupa afuera. Pero, para su sorpresa, la culpa es del belga cuando llega el okupa con ocho policías. “Tienes que darle la llave o te arrestarán”, dijo un policía. Desde ese día, no se le ha permitido el acceso al hall de entrada del edificio bajo pena de prisión.
Hiske entonces decide seguir el procedimiento legal, que promete ser bastante largo. Las audiencias se suceden y ni siquiera aparece la okupa, ella que nunca conoció al abogado designado por el juzgado.
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