Estados Unidos y su papel en el golpe a Salvador Allende en Chile
Estados Unidos ha sido señalado como un actor determinante en la conspiración para acabar con el gobierno democrático de Salvador Allende en Chile. Documentos desclasificados han confirmado la participación de la CIA y el Pentágono en un plan para hundir económicamente al gobierno de Allende.
Henry Kissinger, quien fue Secretario de Estado de Estados Unidos en aquel entonces, fue el arquitecto de las dos intentonas fallidas previas al golpe liderado por Augusto Pinochet en 1973. Kissinger verbalizó su visión de no permitir que un país se vuelva comunista debido a la irresponsabilidad de su propio pueblo.
No obstante, la relación de Estados Unidos con América Latina y Chile va más allá del golpe de Estado. Desde principios del siglo XX, Estados Unidos ha intervenido de manera imperialista en la región. El gobierno de Estados Unidos, incluso, entrenó a militares latinoamericanos en la famosa Escuela de las Américas, donde se formaron muchos de los golpistas de la región.
La intención principal de Kissinger y la Administración de Nixon era asegurarse de que Chile no se «echase a perder». Para lograrlo, trazaron un plan para hacer que la economía chilena «gritara», lo cual contribuyó a la profunda crisis económica que enfrentó el país durante esos años.
El golpe liderado por Pinochet en 1973 fue uno de los más crueles y sangrientos de Latinoamérica. Sin embargo, el escándalo de la Operación Cóndor reveló que las dictaduras vecinas de Argentina y Uruguay también estuvieron involucradas en esta conspiración contra Allende.
Es importante recordar estos hechos históricos para comprender la compleja relación entre Estados Unidos y América Latina. La intervención de Estados Unidos en la región ha dejado un legado de violencia y represión que aún resuena en la memoria de muchos.
