La comunidad internacional se pronuncia contra las restricciones a la libertad de las mujeres afganas

La comunidad internacional se pronuncia contra las restricciones a la libertad de las mujeres afganas

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El jueves, los ministros de Relaciones Exteriores del G7 pidieron a los talibanes que levanten «urgentemente» las restricciones a las niñas y mujeres en Afganistán. En Nueva York, el Consejo de Seguridad de la ONU celebró una reunión a puerta cerrada el mismo día, a la que pronto podría seguir una declaración condenando estos obstáculos a la libertad.

El jueves 12 de mayo, los ministros de Asuntos Exteriores de los países del G7 condenaron las restricciones cada vez más severas impuestas por los talibanes a la libertad de las mujeres afganas, tema de una reunión a puerta cerrada ese mismo día en Nueva York del Consejo de Seguridad de la ONU.

«Condenamos la introducción de medidas cada vez más restrictivas, que reducen drásticamente la capacidad de la mitad de la población para participar en la sociedad» libremente y con igualdad de derechos, dijeron en un comunicado los ministros reunidos esta semana en Alemania.

Los talibanes se aíslan «un poco más de la comunidad internacional», juzgaron los ministros del G7 -Alemania, Francia, Italia, Canadá, Estados Unidos, Japón y Reino Unido-, apelando a los fundamentalistas a levantar «urgentemente» las restricciones. sobre niñas y mujeres.

Estos países se refieren, entre otras cosas, a un decreto promulgado la semana pasada que obliga a las mujeres a llevar el velo completo en público. A fines de marzo, los talibanes también cerraron el acceso a las escuelas y universidades de niñas, solo unas horas después de la reapertura anunciada durante mucho tiempo.

Hombres y mujeres separados en un restaurante en Herat

Los funcionarios talibanes en la ciudad afgana occidental de Herat también prohibieron a hombres y mujeres comer juntos en restaurantes, incluso si están casados, dijeron fuentes el jueves.

El enviado especial de la UE para Afganistán, Tomas Niklasson, dijo que la decisión de los talibanes de excluir a las niñas de las escuelas secundarias en Afganistán «plantea dudas» sobre su determinación de cumplir sus promesas y sigue siendo un obstáculo importante para su reconocimiento internacional. Este giro «planteó dudas (…) sobre la credibilidad de sus promesas y su confiabilidad como socio», dijo el jueves.

En Nueva York, el Consejo de Seguridad de la ONU celebró una reunión a puerta cerrada por iniciativa de Noruega, a la que podría seguir en los próximos días una declaración unánime que condene las restricciones a las mujeres.

A finales de marzo, el Consejo había aprobado por unanimidad un primer comunicado expresando «su profunda preocupación» por la privación de escolarización de las adolescentes y reafirmando «el derecho a la educación de todos los afganos, incluidas las niñas».

El enfoque «ingenuo» de la ONU

Después de la reunión, la embajadora del Reino Unido, Barbara Woodward, criticó la decisión de los talibanes de sacar a las mujeres de la «vida pública». «Es represivo, está mal» y «subraya la incapacidad de los talibanes para sacar a Afganistán de su actual crisis económica, social y humanitaria», dijo a los medios.

Antes de la sesión, tres miembros no permanentes del Consejo de Seguridad también criticaron fuertemente las restricciones impuestas por los talibanes.

«Las políticas de los talibanes siguen centrándose en la opresión de las mujeres y las niñas en lugar de la crisis económica», dijo la embajadora adjunta de Noruega, Trine Heimerback.

Las últimas restricciones impuestas a las mujeres son «completamente deplorables», añadió la embajadora irlandesa ante la ONU, Geraldine Byrne Nason. «Ahora está perfectamente claro que los talibanes no tienen intención de cumplir sus compromisos con la comunidad internacional», agregó.

“Los derechos de las mujeres y las niñas deben estar en el centro de nuestro compromiso colectivo”, dijo la Embajadora Adjunta de México, Alicia Guadalupe Buenrostro Massieu.

A mediados de marzo, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución que renueva la misión política de la Organización en Afganistán por un año, con un enfoque más moderado por parte de los talibanes, que llegaron al poder a mediados de agosto, en comparación con el anterior ejercicio del poder. entre 1996 y 2001.

Según un embajador que habló bajo condición de anonimato, el enfoque de la secretaría de la ONU hacia los talibanes ha sido «un poco ingenuo».

con AFP

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