Wikileaks.- El disidente chino Ai Weiwei protagonizó una protesta silenciosa durante una audiencia judicial en el caso Assange

MADRID, 28 (EUROPA PRESS)

El disidente chino Ai Weiwei realizó una protesta silenciosa el lunes frente a un tribunal en Londres, la capital británica, donde se llevó a cabo una audiencia judicial en relación con el caso de extradición del fundador de WikiLeaks, Julian Assange.

Junto a Ai también estaba el padre de Assange, John Shipton, según información de diversos medios británicos. Justo antes de dirigirse a la zona, el activista asiático dio a conocer una imagen con su hijo, Ai Lao, en la que aparecen con una camiseta que muestra los rostros de Weiwei y Assange haciendo un corte de mangas.

La foto fue tomada en 2015, cuando Assange aún se encontraba en la Embajada de Ecuador en Reino Unido, donde vivió durante siete años para evitar ser extraditado a Suecia, donde tiene abierto un caso penal por presunto abuso sexual.

Ai es un gran admirador del periodista y programador y fue a la prisión de Belmarsh, donde está detenido, para visitarlo. El caso de extradición de Assange a Estados Unidos, donde está acusado de 18 cargos de filtración de miles de documentos secretos, se encuentra ahora en su cuarta y última semana.

Sin embargo, la jueza que lidera el caso, Vanessa Baraitser, acordó posponer el caso para emitir un veredicto después de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, según información del diario australiano The Sydney Morning Herald.

La mayoría de los argumentos de la defensa se basan en la mala salud de Assange, de quien se dice que sufre alucinaciones graves después de mostrar un comportamiento «suicida».

Los abogados argumentan que la extradición a Estados Unidos sería «ilegal», entre otras razones por el riesgo de ser sometido a un «juicio injusto» por el «carácter político» de los presuntos delitos y las dudas sobre el trato que recibirá. Wikileaks, por su parte, insiste en que las acusaciones tienen motivaciones políticas.

Assange fue detenido por la Policía británica en abril de 2019 en la Embajada de Ecuador, donde vivió durante siete años.