Se pueden bloquear aplicaciones en el iPhone utilizando Face ID, aunque no es una función nativa de iOS. Sin embargo, existen métodos para lograrlo. Uno de ellos es utilizando la aplicación de atajos y sus automatizaciones. También se puede bloquear aplicaciones utilizando los modos de concentración. Ambos métodos requieren la intervención del usuario.
Con la automatización de atajos, es posible bloquear la pantalla del iPhone al abrir una aplicación seleccionada. Esto significa que, incluso si alguien tiene acceso físico al teléfono, no podrá abrir esa aplicación específica sin la autorización del propietario.
Por otro lado, los modos de concentración permiten crear una pantalla de inicio con aplicaciones permitidas y se puede cambiar entre modos desde el Centro de Control. Esto es especialmente útil cuando se presta el teléfono a otra persona, ya que se pueden seleccionar qué aplicaciones son accesibles y cuáles no, protegiendo así la privacidad del propietario.
La activación y desactivación de estos métodos es sencilla y se puede hacer según sea necesario. Esto significa que cuando alguien necesita utilizar una aplicación bloqueada, el propietario puede desactivar temporalmente la restricción y volver a activarla cuando ya no sea necesario.
En resumen, aunque no existe una función nativa en iOS para bloquear aplicaciones utilizando Face ID, se pueden utilizar métodos alternativos como la aplicación de atajos y los modos de concentración. Estos métodos brindan una capa adicional de seguridad y privacidad en el iPhone, permitiendo a los usuarios proteger su información personal cuando prestan su teléfono a otras personas.
